UN NUEVO CORAZÓN PARA AMAR

"El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece;
5 no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; 6 no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. 7 Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
8 El amor nunca deja de ser; " 1 Corintios 13: 4-8

¿Qué es el Amor?

El Amor es una actividad y conducta, se manifiesta de distintas maneras en los seres humanos, El amor real no sólo es un sentimiento, también es una decisión. Esta facultad de decidir amar la debe tener todo cristiano. La razón de amar es porque Dios nos creó para este propósito, porque él nos amó primero debemos mostrar amor siempre a las personas sin importar si poseen merito para ello. El amor es sobrenatural porque no está presente en nuestra naturaleza humana porque somos egoístas y orgullosos, pues representa un reto y una amenaza a nuestra propia naturaleza pecaminosa.

El Amor es Sufrido
La más grande expresión de amor se encuentra en el Sufrimiento en la Cruz del Calvario (1Juan 4: 10). Sufrir es cuando el corazón se siente conmovido por el mal que alguien esté pasando. Cuando una persona sufre por un ser querido está mostrando Amor porque se preocupa y luego busca el bienestar de la otra persona. Es estar dispuesto a anteponer la comodidad, bienestar o felicidad propia.

El Amor es Benigno
Es así porque Dios es bueno. Nosotros debemos alimentar el amor con los pensamientos y comentarios buenos y positivos hacia las personas.

El Amor No tiene Envidia
La envidia es pecado y en el amor hay pecado. Para evitar la envidia debemos mostrar bondad. Por el hecho de sentirnos envidiosos no quiere decir que no tengamos amor. La envidia es cuando tenemos actos de maldad aplastadora hacia la otra persona.

El Amor nos es jactancioso
porque no existe la posibilidad o deseo de buscar circunstancias o cosas que puedan crear la jactancia. Resulta arrogante y de mal gusto pensar que uno ama y es amado por las buenas obras como la influencia social, dinero, poder, fama, habilidad, etc.

No se envanece
Porque nunca muere, es eterno. Aunque se marchite, se entristezca, se fracture o sufra daño jamás morirá, Dios se puede encargar de restaurarlo o perfeccionarlo.

No hace nada indebido
Porque está vinculado y funciona bajo los estándares de lo perfecto, lo bueno, lo puro y lo honesto.

No busca lo suyo
No es egoísta y sacrifica los intereses y el bienestar propio. Está contento cuando la persona a quien ama haya satisfecho sus necesidades.

No se irrita
posee una actitud pacífica y bondadosa. Se puede puede irritar contra los acontecimientos, problemas o dificultades pero nunca con las personas.

No guarda rencor
Porque hay libertad y una actitud para perdonar.

No se goza de la injusticia
Porque conoce lo que es justo y bueno y se goza de las causas justas.

Se goza de la verdad
hay un gozo por la verdad, y esa verdad es Jesucristo.

Todo lo sufre
Es estar dispuesto a sufrirlo todo. Siempre y cuando esté dentro de la voluntad de Dios.

Todo lo cree
El amor está vinculado a la Fe, la fe es básica en el amor (Juan 6: 29; Hebreos. 11:6). Es creerlo todo siempre y cuando esté vinculado al progreso y a favor del Amor mismo, o sea todo lo bueno, todo lo puro, todo lo de buen nombre. Amar a Dios es creerle todo lo que él nos diga.

Todo lo espera
Es esperar que cualquier cosa pueda pasar ya sea buena o mala. Es saber actuar y tener un dominio propio frente a las adversidades que se nos presenten; y un gozo si lo mejor esté por venir.

Todo lo soporta
El cristiano debe amar hasta a sus enemigos. Este acto es sobrenatural, pero también si lo practicamos experimentaremos un gozo extraordinario que viene de Dios. (Mateo 5: 43-48; Romanos 12: 19, 20; 1 Juan 3: 14).

El amor nunca deja de ser
Porque es eterno como Dios es Eterno. Si el amor acaba es porque sencillamente no es amor, es otra cosa.

Dios es Amor
Dios no tiene amor, no siente amor, no vive de ello. Simplemente porque Dios es amor. El amor es la misma naturaleza de Dios (1 Juan 4: 8, 16). Dios no solamente ama, sino que él es amor.

TODO DEPENDE DE USTED

La Biblia dice: "Pero si se os deja sin disciplina, de la cual todos han sido participantes, entonces sois bastardos y no hijos" (Hebreos 12:8).

TODO DEPENDE DE USTED: Una vez el creyente comprende el motivo que tiene Dios para disciplinarlo, se da cuenta de una asombrosa verdad: La disciplina no tiene por qué continuar. Todo depende de usted. Solo va a sufrir mientras siga aferrado/a al pasado.

Dios no espera de usted que busque ni que disfrute su corrección. Si lo está disciplinando, Él tiene más deseos que usted mismo de que salga de esa disciplina. Recuerde que su disciplina siempre es solo uno de los aspectos de su relación con usted.

Cuando su madre lo reprendía, no dejaba de cuidarlo, de hablarle, o de querer que usted le devolviera amor a cambio del suyo. A Satanás le encantaría convencerlo de que, puesto que su Padre lo está tratando con firmeza, usted es un perdedor sin valor que no le cae bien a nadie. Lo cierto es lo opuesto. Únicamente debería dudar de su favor si nunca hubiera sido disciplinado.