EL PROFETA DE SU VIDA

Devocional NO. 6

“Diles: Vivo yo, dice Jehová, que según habéis hablado a mis oídos, así haré yo con vosotros.”
Números 14:28

Vimos en otra enseñanza que Dios tiene su oído atento a todos los hombres. Él nos oye todo el tiempo porque es omnipresente, omnisciente, omnipotente. O sea, que él puede estar escuchándolo a usted y a mí al mismo tiempo.

Hoy quiero que vea cuál es la diferencia de lo que habla.
Mire el versículo antes citado. Dice que Dios va a hacer según lo que nosotros hablemos. Entonces usted me preguntará ¿Si hablo temor puedo terminar mal? Sí, si no cambia su confesión a tiempo. ¿Recuerda a Job? En el capítulo 3 versículo 25 declara “el temor que me espantaba me ha venido, y me ha acontecido lo que yo temía”. Job fue profeta de su propia vida. Hablo de lo que temía y eso le aconteció.

Lo que usted habla a Dios es lo que va a experimentar. ¿Recuerda los dos espías de Números 14? Ellos creyeron a Dios y llegaron a la tierra prometida (versículo 30). Llegaron porque creyeron y hablaron lo que Dios les había dicho. El apóstol Pablo también practicaba esto y lo declara en 2 Corintios 4:13 “… conforme a lo que está escrito: Creí, por lo cual hablé…”

Cuando usted cree y confiesa, recibe el poder y potestad de ser llamado hijo de Dios y pasa a ser heredero y coheredero junto con Cristo. Entonces lo de él también es suyo. Créalo y confiéselo hoy.

Ahora le pregunto ¿Tiene ganas de morirse? Me imagino que no. Entonces comience a hablar bien de su vida. Isaías 3:10 habla de usted. Dice: “Decid al justo que le irá bien, porque comerá de los frutos de sus manos.” ¿Lo cree? Comience a confesarlo hoy mismo.

La mayoría de la gente quiere ver para creer, pero bienaventurados los que no vieron y creyeron. Usted es un bienaventurado porque creyó sin ver y si sigue creyendo a la palabra de Dios va a ver cosas gloriosas manifestarse en su vida. Recuerde que todo lo que habla llega al oído de Dios.

Comience hoy a profetizar lo que quiere ver. Dígaselo a Dios y él lo hará. Usted es el profeta de su vida.

Oración: Padre, creo hoy que tú me escuchas y me determino a hablar siempre lo que quiero vivir, que es todo aquello que dice tu Palabra. Todo aquello que tú me dejaste como herencia. La tomaré. En el nombre de Jesús, amén.

ATENTO A SU VOZ

Devocional No. 5 *

¿Hasta cuándo oiré esta depravada multitud que murmura contra mí, las querellas de los hijos de Israel, que de mi se quejan? Números 14:27

Muchas personas creen que cuando hacen una oración y no es respondida es porque Dios no los escuchó. Pero observe conmigo lo que dice la Palabra de Dios. Precisamente cuando Moisés manda espías a reconocer la tierra prometida. Fíjese que de los doce príncipes que fueron enviados sólo dos trajeron un buen informe (Números 13 y 14). Los otros diez sólo hablaron palabras contrarias a lo que Dios les había dicho. Hablaron temor y fracaso. Miremos juntos el versículo 27 de Números 14. Dice que Dios oía a la multitud quejarse.

¿Qué nos enseña esto? Que todo lo que hablamos lo hacemos al oído de Dios. En este caso, el pueblo hablaba en contra de Dios, no hablaba su Palabra. Y sin embargo Dios los estaba escuchando.

Miremos el Salmo 34:15. Declara que Jehová tiene su oído atento al clamor de los justos. Esto nos muestra que Dios nos está escuchando a todos. Y si todavía no le quedó claro miremos un poquito en 2 de Reyes 6, lea los versículos del 8 al 11. El versículo 12 dice: “Entonces uno de los siervos dijo: No, rey señor mío, sino que el profeta Eliseo está en Israel, el cual declara al rey de Israel las palabras que tú hablas en tu cámara más secreta.” Acá vemos a Dios trayendo luz y revelándole a su siervo los planes del enemigo.

Con todo esto podemos notar que Dios escucha las palabras de los justos, la de los incrédulos, como las de los diez espías o Tomás (Juan 20:24 y 25)- y también la de nuestros enemigos. Esto es una buena noticia porque si usted tiene su oído atento a la voz de Dios, Él le va revelar los planes que sus enemigos puedan tener contra usted.

Cuando escucha las enseñanzas de pacto recibe la revelación y a través de ella hay en muchas cosas en las que no va a caer porque le es revelado por dónde está viniendo el enemigo.

Recuerde: Lo que usted habla, lo está hablando al oído de Dios. Sea bueno o malo. Hable palabras buenas para su edificación. Hable la Palabra de Dios. No caiga en la categoría de los diez espías. Usted tiene el poder para hacerlo. Hable fe y agradará a Dios.

Oración: Padre, hoy conozco que tú siempre me estás oyendo. Me comprometo a hablar buenas palabras para agradarte. Lo haré en el nombre de Jesús, amén.

¿Por qué y para qué estás en el mundo de los negocios?

El hombre NUNCA se limita a "Simplemente Existir, ya que siempre decide cual será su existencia. TÚ SIEMPRE estás decidiendo quién serás en tu próxima hora de vida… Tú eres quién único tiene el poder de decidir lo que pasará con tu vida, y lo creas o no, cada día estás ejerciendo ese poder, ya sea consciente, o inconscientemente. - Jordys R. González.

¿Eres Realmente Consciente de Hacia Dónde te está Llevando Tu Negocio?


Estimado Suscriptor/a:

Cada vez que converso con un pequeño empresario y surge la oportunidad, le pregunto... Concretamente, ¿por qué te lanzaste al mundo de los negocios?

Las respuestas a ésta pregunta son muy variadas, sin embargo, se podrí¬an clasificar, a grandes rasgos, en dos grupos:

• Primero, están los que se lanzaron a emprender un nuevo negocio porque tení-an un sueño, una visión del tipo de negocio que querí¬an construir, y además, se veí¬an a si mismos experimentando un determinado estilo de vida, GRACIAS a este negocio. Estos son los que ven y sienten que su negocio es un VEHíCULO.

• Y por otra parte, están los que emprendieron en los negocios por necesidad o desesperación, porque no encontraron una posibilidad mejor para "ganarse la vida", o sencillamente, no querí¬an rendir cuenta a nadie. En este grupo, también están los que nunca decidieron emprender, y son los que en algún momento, tuvieron que ASUMIR ser parte de un negocio, como es el caso de algunos negocios familiares. Estos son los que ven y sienten que su negocio es un FIN.

Pero la pregunta es, ¿por qué te lanzaste tú, al mundo de los negocios?, ¿con cuál de los dos grupos te sientes más identificado?

Lo interesante de todo esto, es que el segundo grupo es inmensamente mayor al primero. Son muchí¬simas más, las personas que se mueven por la desesperación, que los que lo hacen por la inspiración.

Sin embargo, la pregunta, ¿por qué te lanzaste al mundo de los negocios?, nos hace reflexionar sobre una decisión y una acción pasada, que prácticamente, ya no tiene importancia.

Ahora lo VERDADERAMENTE IMPORTANTE es conocer, ¿para qué continúas en el mundo de los negocios?, ¿qué tipo de negocio estás construyendo y con qué propósito?, ¿estás llevando a tu negocio, o tu negocio te está llevando a ti?

A esta altura, da igual la razón por la que te decidiste a emprender en tu negocio o profesión, ahora lo importante es lo que piensas y quieres hacer con el tiempo que te queda, y que independientemente de la salud fí¬sica y mental que puedas tener, no es prudente confiar en la certeza de que dispones de TODA UNA VIDA POR DELANTE. ¿No crees?

¿Estás persiguiendo e intentando Conquistar algún Sueño, o te estás limitando a sobrevivir en el día a día?

¿Por qué te pregunto esto?
Porque si aún no lo eres, debes ser TOTALMENTE CONSCIENTE de que tu negocio no es más que un medio, un vehí¬culo, una herramienta para que tú logres Conquistar Tu Sueño. Debes convertir a tu negocio, en el vehí¬culo que te permita materializar y experimentar tus sueños. Tienes todo el derecho y las posibilidades de hacerlo.

Puedes estar de acuerdo, o no, con esta reflexión, sin embargo, me gustarí¬a pedirte que medites tranquilamente, sobre la CONVENIENCIA DE CREER O NO en ella.

Yo no tengo la razón, ni siquiera me atreverí¬a a asegurar que lo que estoy compartiendo contigo, es una verdad absoluta, porque después de todo, ¿qué es verdad y que es mentira? Sin embargo, esto no me impide DECIDIR CREER, que mi negocio es un medio más, para experimentar lo que quiero y espero de la vida, como persona.
¿Qué decides creer tú?

Da igual el Sueño que tengas. Si estás en el mundo de los negocios, y en particular, si eres propietario o director de una pequeña y mediana empresa, debes hacer todo lo que esté a tu alcance, para ir mejorando, profesionalizando y sistematizando TU VEHíCULO (tu negocio), con el propósito de que éste, te permita Conquistar Tu Sueño... Y es aquí¬ donde LanzateYa.com entra jugar su papel.

Por el momento, me conformo con que reflexiones y abras tu mente a lo que hemos compartido en éste boletí¬n, y sobre todo, que tomes la firme decisión de convertir tu negocio, en un vehí¬culo que te permita "Conquistar Tu Sueño". Recuerda que NADIE te lo impide. El único que te lo puede impedir, eres tú.

Desconozco la situación y posición actual en la que se encuentra tu negocio, los fracasos o éxitos que hayas cosechado, las satisfacciones o insatisfacciones que puedas estar experimentando como consecuencia de tu gestión como propietario y/o lí¬der, etc... De lo que si estoy seguro, es que cualquier resultado empresarial que estés cosechando actualmente, proviene del negocio que Tú has creado, basándote en TU visión, TUS creencias y TUS experiencias.

Por lo tanto, si quieres comenzar a cosechar resultados diferentes, debes empezar por cambiar tu manera de interpretar e interactuar con tu negocio. Tu cambio de paradigma, es el primer y más importante paso para alcanzar cualquier logro, y el simple hecho de que comiences a creer en la posibilidad de materializar todo lo que hemos compartido, es un gran avance... El CÓMO HACERLO, lo iremos descubriendo y compartiendo, de manera gradual e interactiva, con la ayuda y participación de todos los pequeños empresarios y profesionales, que como tú, forman parte de nuestra gran comunidad de emprendedores con un objetivo común... "Conquistar Sus Sueños".




PECADOS DE MUERTE


Lic. Isaú Orellana

Hoy nace una nueva sección en Sermones del domingo, titulada: RESPUESTA BIBLICA. Este espacio se pone a la disposición del público lector con el propósito de bendecir su vida, y sin la intención de entrar en discusiones necias en temas controversiales de ninguna índole. Buscamos la edificación del cuerpo de Cristo y dar la gloria a Dios en todo. Tampoco pretendemos que los lectores estén de acuerdo en todo lo que escribimos. Creemos que tienen derecho a expresarse, pues para eso existe la libre expresión del pensamiento.

Agradezco a todas las personas que diariamente envían sus preguntas a Sermones del Domingo. Reconozco que dar respuesta a cada una de ellas no es cosa fácil. Pero tampoco es imposible. Pido por favor a usted que ha enviado su pregunta que nos tenga paciencia, pues en cuanto sea posible le llegará la respuesta.

La siguiente pregunta la envía el hermano Alex de Paz, a quién con mucho gusto le respondemos.

PREGUNTA:
Según 1ª. Juan 5:16-17 ¿Cuáles son los pecados de muerte y los que no son de muerte?

“16si alguno viere a su hermano cometer pecado que no sea de muerte, pedirá, y Dios le dará vida; esto es para los que cometen pecado que no sea de muerte. Hay pecado de muerte, por el cual yo no digo que se pida. 17Toda injusticia es pecado; pero hay pecado no de muerte”.

RESPUESTA:
Juan describe una situación en la cual uno de los miembros de la iglesia ve a otro miembro cometiendo lo que describe como un “pecado que no sea de muerte”. En esta situación debe interceder por su hermano, y así Dios le dará vida. Juan subraya que ésta es una posibilidad solamente en el caso de aquellos cuyo pecado no lleva a la muerte. Porque existe la posibilidad de pecados que llevan a la muerte, y él no recomienda que se interceda por estos. Luego les recuerda a sus lectores que “toda injusticia es pecado”, pero que hay una clase de pecado que no lleva a la muerte.

El problema básico aquí es el de las dos clases de pecado mencionadas por Juan. Obviamente podía dar por sentado que sus lectores sabían de qué se trataba, y por tanto no tenía necesidad de explicar lo que quería decir. Es probable, entonces, que no se refiera a algo particularmente recóndito. Podemos empezar notando que la terminología empleada aquí, “pecado que lleva a la muerte”, se encuentra en algunos escritos judíos, pero allí se refiere a pecados que llevan a la muerte física del pecador. Aunque el Nuevo Testamento conoce casos de personas que sufrieron la muerte física por sus pecados, es improbable que esto sea lo que se tiene en mente aquí. Es de presumir que en tales casos se reconocería el pecado de esta clase solamente por la grave enfermedad o la muerte real de la persona en cuestión. Pero no hay indicación de que Juan estuviera pensando en la muerte en este sentido.

Pero, ¿Qué clases de pecado pertenecen a estas dos categorías? Juan está interesado en enfocar los pecados que son incompatibles con la condición de hijo de Dios, y estos se concentran en la negación de que Jesús es el Hijo de Dios, el rehusarse a obedecer los mandamientos de Dios, amar el mundo, y el odio a los hermanos. Tales pecados son característicos de la persona que pertenece a la esfera de la oscuridad y no a la esfera de la luz. Esto nos llevaría a la conclusión de que por el pecado que lleva a la muerte Juan quiere decir los pecados que son incompatibles con la condición de hijo de Dios. La persona que consciente y deliberadamente escoge el camino que lleva a la muerte ciertamente morirá. El pecado que lleva a la muerte es el rehusar deliberadamente creer en Jesucristo, seguir los mandamientos de Dios y amar a los hermanos. Esto conduce a la muerte porque incluye el negarse deliberadamente a creer en el único que puede dar vida, Jesucristo el Hijo de Dios. Por el contrario, los pecados que no llevan a la muerte son aquéllos cometidos impensablemente y que no implican el rechazo de Dios y su medio de salvación. El pecador es vencido por la tentación contra su voluntad: todavía quiere amar a Dios y a su semejante, todavía cree en Jesucristo, todavía anhela ser librete del pecado.

Esta explicación de las dos clases de pecado que tiene Juan en mente da un sentido satisfactorio al pasaje; pero todavía deja algunos puntos que necesitan aclaración.

En el amor y liderazgo de Cristo,
Pastor, Isaú Orellana